viernes, 12 de enero de 2018

Ascenso a la Bola del Mundo.


 
Llega el invierno, y con él la nieve. ¿Qué mejor experiencia que subir a la bola del mundo? A mi mejor amiga y a mí, nos picó la mosca detrás de la oreja, y tras investigar las rutas y el acceso en transporte público, decidimos empacar bocatas, enfundarnos nuestros gorros, guantes y botas y ponernos en marcha hacia la aventura.

- Tras la odisea de dos horas en el transporte público, llegamos caminando al puerto de esquí de Navacerrada. Habíamos encontrado nada más llegar lo que íbamos buscando... ¡Nieve! Como niñas comenzamos a amasar las porciones de cielo blancas y a lanzarlas al aire. Continuamos ascendiendo, prestando especial atención a las señalizaciones pintadas en la roca, y pasito a pasito, resbalón a resbalón (había zonas con una fina capa de hielo), llegamos a la cima.
La satisfacción y la alegría que se generan en ese momento son indescriptibles, esa sensación de vitalidad y de fatiga que terminan en un resoplo, y una sonrisa.

- Más breve de lo que esperábamos, pero más intensa de lo que nos imaginábamos, pasamos juntas un fantástico día en el puerto de Navacerrada. Lo cierto es que yo ya había hecho antes esa ruta, pero siempre acompañada de mi familia y compañía, y nunca me había enfrentado al reto de ir sola con mi amiga, sin nadie que nos guiara. Por primera vez, hicimos por nuestra cuenta una excursión de senderismo y, aunque tuvimos algunos contratiempos, fuimos capaces de resolverlos de manera que no afectaron al paseo, y pasamos un asombroso día.

Me he dado cuenta que, definitivamente, el deporte y la naturaleza, son una de las cosas que más me llenan. Si además, vienen de la mano de buena compañía, pocas cosan lo pueden superar.

Este año, por Navidad, en vez de regalos, le pediré a Papá Noel, más experiencias así.


¡De momento mi regalo será esta foto desde la cima!






25 NOVIEMBRE, NO A LA VIOLENCIA DE GÉNERO

Que las mujeres mueren en España a manos de sus parejas es una realidad. 

Debido a que el 25 de noviembre es el día Internacional de la violencia contra la mujer, creímos oportuno en nuestro colegio hacer una campaña con el objetivo de crear una conciencia entre los estudiantes, a cerca de el problema que suponen los malos tratos en una relación.

¿Cómo lo hicimos? Inundamos las paredes de pasillos, escaleras, e incluso baños, con frases, poemas y dibujos que hablan de la violencia de género, los cuales los alumnos habíamos recopilado en los días anteriores. En mi caso, hice un dibujo.

Además creamos un stand en el que la gente pudiera aportar su propio comentario, opinión o reflexión, de manera que hiciera a todo el mundo partícipe de la causa.

Me doy cuenta de que actos como este, son importantes para mi propio entorno y para la sociedad. Si deseo un cambio, debo empezar a luchar por él. Ya sea un pequeño gesto, o una gran obra, todo lo que haga puede marcar la diferencia. Y como dijo Emma Watson en su discurso en favor del feminismo, "Si no yo ¿Quién?, Si no ahora. ¿Cuándo?"

Si deseamos luchar contra injusticias, el momento oportuno es YA.




BI HAPPY

Han pasado casi dos meses desde que empezamos a cursar este programa, y lo cierto es que se puede notar una gran diferencia con respecto a la secundaria. Ahora el volumen de trabajo es mucho mayor, y al principio siempre cuesta arrancar.

En esta actividad organizada por compañeros de clase, hacemos dinámicas en la que se nos invita a expresar como nos hemos sentido desde que empezó el curso escolar, y al mismo tiempo tenemos la oportunidad de dar apoyo a nuestros compañeros e intentar resolver sus angustias. Adía de hoy, se han llevado a cabo dos reuniones.

En la primera reunión sacamos muchas cosas de provecho, que nos pueden ayudar a hacer estos próximos meses más fáciles. En la segunda, nos centramos sobretodo en los aspectos positivos de este bachillerato.La verdad es que fue muy enriquecedor, debido a que nos ayudó a darnos cuenta de que, a pesar del esfuerzo que  ha resultado superar el primer trimestre, las cosas positivas tienen un peso mayor sobre las negativas. Definitivamente, lo que está claro es que con la ayuda de todos va a ser más fácil llevar el peso del programa.


martes, 9 de enero de 2018

MINDFULLNESS



Al empezar este curso, sabía que iba a pasar a través de momentos estresantes, y era menester buscar una vía de escape. La profesora de historia, nos ofreció realizar unas sesiones de meditación, con el objetivo de rebajar las tensiones del sacrificado primer trimestre.

Mi padre siempre me ha inculcado la importancia de la relajación y de una mente sana; en mi año en Malasia, pasé un tiempo en un templo budista, donde me enseñaron los básicos de la meditación de su religión: desde posturas de piernas a gestos faciales. Sin embargo, la idea de comenzar clases de meditación, me parecía un poco rara al principio.

Fijamos un día, y decidimos que nos quedaríamos a comer en el colegio, y realizaríamos la actividad inmediatamente después. Llevamos esterillas, bocatas, bebidas y todo lo necesario para la sesión. La profe realiza diferentes dinámicas, con las luces apagadas y música de fondo (cuando no viene el jardinero a hacer ruido, claro), y guía la clase mientras todo el mundo está en silencio.

A continuación, describiré algunos momentos que me han dejado una marca especial.

En la primera sesión, había conseguido llegar a un punto entre el sueño y la vigilia, el cual, según la profe, es el ideal para una buena meditación. La sensación era indescriptible, sentía que estaba en el vacío, como flotando. No había nada a mi alrededor, todo era negro. Cuando de pronto, sentí un ruido y se prendió en mi pecho una llama de angustia terrible. Comencé a temblar y quería llorar. De repente volví al gimnasio. Rápidamente me di cuenta de que no pasaba nada, que no había por qué tener miedo, e intenté recuperar mi estado anterior de vigilia. Pero ya era tarde, puesto que los ronquidos la bella durmiente (cuyo nombre no revelaré en esta entrega) que yacía junto a mí, no me dejaron volver.

Todavía tengo curiosidad a cerca de aquel suceso. Aunque salí muy relajada de esa sesión, temblaba solo de recordar ese momento. La meditación no es un chiste. Supongo que al estar en ese estado, el cuerpo se hipersensibiliza y una pequeña cosa puede generar una gran reacción.



A día de hoy llevamos tres sesiones. Hacemos una cada mes, y espero impaciente la siguiente. ¿Quién hubiera dicho que iba a estar trabajando mis chacras?



Aprendizaje autodidacta del ukelele



Cuando estaba de intercambio, tenía mucho tiempo libre, lo cual me hizo explorar nuevas actividades y desarrollar habilidades desconocidas para mí hasta el momento. Una de ellas fue el ukelele. Cuando mi hermana de acogida trajo este pequeño instrumento a casa, me quedé prendada y decidí que aprendería a tocarlo. Antes de volver a España, me compré uno propio.

Ahora el reto es aprender a aprender, es decir, desarrollar herramientas para aprender por mi cuenta a tocar este instrumento. Lo cierto es que hoy en día, con la cantidad de información que tenemos disponible en la palma de la mano, resulta fácil encontrar cientos páginas y aplicaciones para principiantes. Encontré una app que me permite ver las tablaturas de muchas canciones y en la que aparece cómo colocar los dedos en los acordes. Aprendo estos sobre la marcha, en cada canción, aparece un nuevo acorde, y así aprendo más y más. Súper útil. Youtube es otra gran herramienta. Lo uso sobretodo para aprender el rasgueo. Es difícil aprenderlo si no lo ves y lo escuchas al mismo tiempo. Puedo repetir un vídeo tantas veces como lo necesite hasta que me salga. También se encuentran cientos de partituras por toda la red, desde las más simples a las más complejas.



Una ventaja del ukelele, es que al ser un instrumento tan pequeño, es fácil de transportar a todos los sitios. Con amigos, de acampada, de excursión e incluso de viaje. Estas Navidades, lo llevé conmigo a un recorrido por Andalucía. Con mi compañero Javivi, alias "More", recorrimos las calles de la preciosa ciudad de Córdoba, inundándola de los sonidos de dos ukeleles principiantes. Incluso, nos encontramos con un músico callejero y nos invitó a acompañarle con el piano. Tocamos la clásica canción de Somewhere Over the raimbow. Es la primera canción que la mayoría de " ukelelistas" aprendemos al comienzo de nuestra aventura.

Me doy cuenta de que la clave de todo esto es practicar, practicar y practicar y cuando te frustres, practicar todavía más. Nadie nace sabiendo; ni siquiera esos artistas tan sumamente famosos que escuchamos con tanta admiración. Desde luego los hay quienes tienen talento nato, pero creo que con esfuerzo y constancia todo se puede conseguir.
De momento dejaré de regalo de reyes la última canción que aprendí.

¿Qué mejor que tocar una malagueña en Málaga?

Como veréis, aún estoy comenzando... ¡Seguiré esforzándome!